FIDEL HERNANDEZ

INVITACIÓN A UNA MUJER

Sumérgete conmigo en las sombras,

mujer, y oirás llorar

a níveas almas enamoradas acostadas

en etéreas alfombras.

 

Olvídate de esta sociedad podrida.

Libérate de cadenas

que se anudan a tu frágil y largo pelo,

que aprisionan tu alma en pena.

 

Acurrúcate en mis acogedores brazos ansiosos.

Abandona las ropas

de payaso con las que nos obligan a vestir

esos que solo nos acosan.

  

Me sumerjo ahora en la profundidad

de tu virginal sombra

y te encuentro ahí, receptiva y plena, mujer.

¡Qué felicidad!