Esto me recuerda un caso
me decía un comentario
era un cuento raso
que se veía a diario.
Un hombre de bigote
algo bajo pequeñito
él era un armatoste
decía el petisito
Él quería enamorar
a unas décadas conciente
empeño le ponía a no fallar
a la anciana pretendiente.
El oro y el moro ofrecía
para convencerla insistente
la casona y la quinta que tenía
era un amor conveniente.
Amor una arruga más
u otra menos, le decía
no nos fijemos de más
que el gasto así no varía.
De besos te llenaré
y caricias por montón
en tu cuerpo anidaré
mi potencia de valentón.
Ahora puede que
necesite un favor
devilucho me allaré
pero te amaré con fervor.
La quinta y sus frutales
ya necesitan mucho trabajo
mejor venderlas a unos tales
así tomaremos ambos, un relajo.
El gran departamento
de la calle angostura
hay que venderlo al momento
ya los años lo convierte en basura.
La casa del estero será nuestro nidito
dime si no es cierto
que la razón tengo mi amorcito
la aprovecharemos antes que esté muerto.
Y en caso que yo muriera
antes que vuestra finura
a penarte yo viniera
por tu amor, desde la sepultura.
Ves como te amo
y como te amaría
te queda decir solo mi amo
son tuyas mis granjerías.