HOY...me vestí de aurora para sentir la vida.
Entrelacé mi mirada con el horizonte más allá del tiempo
para clavar en mi pecho la mirada ausente del futuro
que me baña en las aguas lisonjeras del crepúsculo.
HOY...le sonreí a la vida pisando mil espinas.
Aquellas que quedaron divagando en un recuerdo insano.
Y en el recodo eterno de un pañuelo al viento en triste despedida
realizo que el camino ya se estrecha al despertar la noche.
HOY...mi eternidad se escapa por las arrugas muertas
y aplaude al porvenir de mi efímera existencia.
Soñando entre las sombras de luces ya marchitas
que un mañana me espera danzando en la alborada.
LEONARDO HENRRICY SANTIAGO
(Leo Henry)