¿Dónde estáis ahora,
conocedores de mis miedos?
¿Dónde estáis ahora
que tanto ruido hace el silencio?
¿Dónde las dulces palabras?
¿Dónde los anhelados besos?
¿Dónde mis sueños felices?
¿Dónde mi ánimo lejanos?
¿Dónde el fiero deseo?
¿Dónde os lleva la noche?
¿Dónde os escondéis que no os veo?
¿Dónde está la esperanza
que hambrienta, la oscuridad se traga?
De mi pesadilla me despertaste
con un manto de dulces
besos, con una caricia de ámbar
que me salvó del abismo
donde a veces me sumerjo.
¿Dónde os guarecéis, rasgantes
cuchillas de almas vírgenes y nobles?
Nada me importa ya, dar con vuestro
paradero, bastaría seguir
el rastro de mi sangre, tanto tiempo
derramada sobre
alfombras tintadas para el éxito
y la de otros muchos
incautos que desangrándose ahora,
se preguntan asustados,
dónde estáis y el porqué de vuestro
repentino silencio...
Pilar González Navarro.
Abril 2018.