Mi único amante es el tiempo
Que sin escrúpulo abusa de mí,
Quiere que esté con él.
Me promete flores todos los días
Y una casa propia.
Insidioso -le digo- déjate;
Y para por un momento.
Ya estoy chata de seguirte el paso.
Lo ignoro, lo pierdo,
Después me las cobra caro
Siempre me pisa los zapatos.