¿Dónde te escondes ahora?
A quemar nuestras banderas
A romper nuestros contratos
Rehuyendo te desdibujas
Sobre carros de fuego
Dejando tras de ti tan solo
Campos de ceniza
Y lechos de piedra dura
Corriendo a una ignota frontera
Donde puedas romper
Prófuga de mis besos
Podrás tumbar uno a uno los idolos,
Los dioses y los templos
De la tremulante ciudad
Que fundé sobre tu cuerpo
Podrás tumbar si quieres
Los pedestales en las hermitas
De los recuerdos
Pero antes de los baldios, las piezas rotas y los consejos
Antes de condenar al penoso gris al delirio
Antes de sentir el pulso muerto
Y dejar las sobras a los fantasmas y la carroña
Fundamosnos en un adios
Uno con gallardía
Un adios que sea centella
Y nos entreguemos con gusto a
la estrepitosa caída