Los secretos son como mi tormento,
de no poder decirte lo que siento,
cuando la libertad no fue perdida
en acordes de penas y tristezas,
Vendidas esperanzas, soledad
que hoy son como una verdad con desvelo,
dónde la luna acrisolada esconde
el alma en noches tristes, de frialdad
Esas noches, la eternidad condensa,
en dos palabras que serán cantadas
como rocas oxidadas de amar.
Esta angustia encoge, hoy la inspiración
como dos poemas que me pediste,
más aún sabrás, con este tercero.
Que no habrá solo otoño en el olvido,
ni verano sin versos, ni mi amar
serán secretos perdidos al mar.