Tu poema
¿Alguna vez te has puesto a ver
a los pájaros siguiendo sus aires
o a los niños jugando en volantines
o has escuchado el sonar de un barco al zarpar
en los mares pronunciados?
¿Alguna vez has observado y visto
El aleteo del colibrí llegando a las flores
o a los luceros asomarse en los cielos
o los cantos del viento aparecer
en los silencios?
Mírate ahora, para y observa
no vueles tus ojos deprisa…
Son pequeñas las vivencias, ámalas.
El poema en breve acabará…
vas leyendo las letras a velocidad extrema
y vas leyendo sin puntos y las comas,
de un renglón a otro sin sentirlo
Y sin comprender.
Más aún ,
¿Alguna vez has cuestionado tu vida andando y
preguntando cómo vas?
¿Has Escuchas la contestación y su valor?
Cuando pasan los minutos y se descubre la luna,
¿te cubres ente sabanas en tu cuarto
idealizando los tantos trozos y los hechos
del hervor del mañana?
Mírate ahora , para y observa
no vueles tus ojos deprisa…
Son pequeñas las vivencias, vívelas.
Alguna vez les has dicho a tus familiares,
¿Lo dejamos para mañana?
¡luego me cuentas!¡Mañana habrá tiempo!
...y en tu asombro y prisa dejas apartado
su nostalgia y lamento.
¿Alguna ve perdiste la conexión
y olvidaste el rastro y retrato
de un amigo dejándolo enterrado
en mares profundos, por no sacar
de los rincones este tiempo?
Has sentido que has perdido los detalles,
fuerzas y valor para
tomar tu teléfono, marcar,
enviar un whatts app
hablar o escribir preguntando ¡Hola!
¿Cómo estás? ¿Cómo está tu vida?
Mírate ahora, para y observa,
no vueles tus ojos tan deprisa...
Son pequeñas las vivencias, ámalas.
El poema en breve acabarán,
vas leyendo las letras a velocidad extrema,
vas leyendo sin puntos y comas,
de un renglón a otro sin sentirlo
y sin comprender.
Cuando vas de prisa, corriendo,
acelerando como ráfaga el camino
para llegar a una cima desperdicias
las fiestas, el mirar de las bellezas y
la mitad de la diversión mientras pasas.
Cuando te atormentas, ansías y
miras aprensivamente tu entorno,
miras todo con preocupación y aceleras
es como si echaras al cesto
un valioso obsequio envuelto con su moño…
La vida no es un carrera ,
ni ver quien llega,
quien acerca primero a la meta,
hay que tomarla poco a poco y afianzarla
sentirla con sus tiempos .
Mírate ahora, para y observa,
no vueles tus ojos tan deprisa...
son pequeñas las vivencias, vívelas.
Lee atento tu poema, ámalo,
acarícialo, compréndelo , llénate de él
antes que los versos se olviden
y las letras lleguen, se vayan y
desaparezcan en el cierre
y no las vuelvas a leer.
Mariana Gutiérrez, abril 2018