Hoy mis instintos quieren acompañarte
anhelan tu cuerpo, tu mirada, tus caricias
lo buscan desenfrenadamente,
aún tu estando ausente, a tus besos añoro insaciablemente
porque no desean otro.
Anhelo y extraño tu mirada que me observa
y me dices eres toda mía,solo mía, mía mía
a tu cuerpo que no desea a otro hombre
sino solo a ti, a mi amor exquisito.
¿A quién extraño?
Te lo respondo:
A ese hombre galante, maravilloso, de piel blanca,
ojos claros, alma enamorada,
aquel que llevo tatuado en mi pecho
porque ha dejado huellas en este tonto corazón.
Añoro al dueño de mis locuras
el que me eleva al cielo,
me vuelve soñadora,
aquel que me hace subir la temperatura
con el gozo sumergido en el fuego de la pasión,
ese que con ternura me colmaba de emociones,
de complicidades, de picardías
alejándome de la terrible realidad.
Así, al finalizar la noche
acompañada de una copa de vino
anhelo disfrutar juntitos
de esa cálida entrega total,
deleitándonos una vez más
pues éste amor para ti
siempre será incondicional.
Entonces entre pensamientos y anhelos
paso mi vida escribiendo
no lo puedo evitar, quizás sea la soledad
pero mi carrazón por ti palpita
en mi constante caminar.
Artemisa
Abril 2018
Caminos Inciertos
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Venezuela