I
La vida viene y se va,
asúmela hasta el final,
sin parar, con dignidad.
No la desperdicies.
Vive sus instantes,
alegres y tristes,
porque en su tiempo
y en su espacio,
nada es estático,
todo es cambiante.
II
Hoy puedes sonreír,
y mañana llorar,
sea lo que sea,
tienes que luchar,
tienes que seguir.
Lo solemne es vivir,
soñando y haciendo,
sembrando porvenir,
dando el ejemplo,
en tu magno existir.
III
En la vida todo cambia,
y hay que aprovecharla.
La felicidad es efímera.
¡Celébrala, baílala!
La tristeza es fugaz,
gímela, libérala.
La vida es un vaivén,
nace, decae y florece,
como las olas del mar,
que llegan, están y se van.
IV
La vida es una hamaca
cuyo mecer
en un amanecer,
sube, baja y sube
se detiene y arranca,
se bambolea y detiene,
hasta que anochece.
Es la vida un concierto,
cuya música no cesa
ni con la muerte.