Voy a vivirte viajera,
Y olvidare tu canto ruiseñor eterno.
Voy a vivirte alegría
Y olvidare tu huella al estrenar el día.
Porque mi lengua pervierte para convertir en duelo la palabra fría.
Voy a tomarte en mi mano estrella de olvido
Y llegaremos sin duelo al cielo de mi exilio