Viniste tersa y fulminante
surgida sobre los talones de la nevada
en el territorio del amor estepario
no se conciben vidas alternativas
ni desenlaces de boca lenta
quizás una claridad perentoria
al trasluz del azar
que atruena en nuestra mudanza
al límite del destierro
emisario de letanías amorosas
desciende al cuerpo lo sublime de los ojos
para tensar el arco del deseo
Diana la cazadora diestra del errático Eros