El silencio se impone
en la inmensidad blanca
que luce majestuosa
resplandeciendo luceros
ante el sol del invierno
Mis pasos se hunden
quebrando la pureza
de la suave superficie
y en esa soledad florecen
tus marchitos recuerdos.
Una amarga nostalgia
impregna el sendero
de mis cansados pasos
y palpitan en mi sien
saliendo por mis labios
evaporándose en la nada