Sangre bendita que corre
por las calles de Managua
serás germen libertario
que ensanchara nuestras almas;
las llenaras de coraje
para darle a nuestra patria
libertades que nos quitan
las ambiciones malvadas
y que llenan de dolores
a nuestra gran Nicaragua;
aquellos que han cercenado
esas vidas tan preciadas
ha de juzgarlos la historia
con la condena mas alta
y sus grandes fechorías
las pagarán, ¡y muy caras!
La sangre de Alex Bonilla,
y la tuya, Álvaro Dávila,
seran chiotes de conciencia
que despertaran el águila
que anidan todos los hombres
esperando abrir sus alas
para volar por los cielos
sin cadenas y sin jaulas.
Esa sangre segoviana
del enhiesto Orlando Pérez
abonaran los pinares
con el perfume que crece
cuando brilla la justicia
y la libertad se siente;
junto a Hiltón Manzanares
seran faros del camino
que no apagaran las balas
del tirano corrompido.
Y tu, Karlita Sotelo
serás con Carlos Bonilla
ese dulce manantial
donde se bebe agua limpia
para tomar el ejemplo
que nos dió Darwin Urbina.
El grande Michelle Cruz
será con Alvin Bonilla
dos estrellas rutilantes
que iluminaran premisas
de los nuevos horizontes
que esta tierra necesita
para tener esa gloria
de gobiernos sin codicia.
Con Richard Pavon Bermudez
y Giovanni Sovalbarro
se sembraron los pilares
para que quede muy claro
que nuestro pueblo es valiente
y luchara sin descanso
para ver surgir el sol
que nos brinde con sus rayos
una patria libre y justa
en donde todos quepamos,
sin represión y sin muertes
con que quieren obligarnos
a soportar injusticias
queriendo atar nuestras manos
con su crueldad tan maligna
de animales inhumanos
que han llenado nuestro suelo
con sangre, miseria y llanto!
Autor: Aníbal Rodríguez.