A partir de hoy…
Hoy he decidido parar este vertiginoso viaje,
dejar obligaciones que solo son cadenas,
encontrar la tranquilidad, en lo sencillo,
en la simpleza de una flor de pantano.
Para que aspirar a mantener una mentira,
un mundo irreal de promesas utópicas,
de estúpidos proyectos diarios,
que nunca conocen un nuevo amanecer.
La diferencias entre la vida del pobre y la del rico,
es que el rico se preocupa de no volverse pobre,
el pobre no tiene de que preocuparse y es feliz.
Indudáblemente, después de haber andado caminos,
de haber enfrentado conflictos, ganado unos,
perdido otros y seguir viviendo,
he entendido que la tranquilidad es ahora,
que la vida no espera, no avisa, no se despide.
Todo es tan efímero, que esto que hoy digo,
puede no conocer un mañana… un proyecto más,
cerramos los ojos, perdemos la certeza de la luz
y de la vida, al abrirlos… volvemos a empezar.
Sin pensar en el futuro, a partir de hoy…
la vida, solo será vida, pase lo que pase…
Luchar por vivir, a sabiendas de morir,
es una ironía a la que no le quiero apostar.
Ron Alphonso
30 de abril de 2018