Load a los sembradores
que movidos por el amor a la tierra
siembran de esperanzas
los campos desiertos
y cosechan frutos dulces
regados con su sangre y sudor.
Load a los agricultores
que no temen la inclemencia del tiempo
y arrecian su azadón y guadaña
contra el abrojo y maleza
para la limpia del plantío.
Incansable batalladores
que gestan su gloria
dando alegría a los que esperan
la cosecha de sueños.
Load a los agricultores
que con humildad besan la tierra
después de herirla con la estaca;
libres del pecado de sangre
su fruto glorifica al Creador
y calma el hambre del mundo.