Sobre la nieve de los montes, corona de las aldeas,
Un español hirió al águila de Asturias,
Que el vuelo amenazaba, su aprisco blanco.
Erizado, el ave se va y hace llover sangre,
Sube tan rápido al cielo como el relámpago baja,
Mira su sol, con un pico abierto , lo aspira,
Cree coger de nuevo la vida a su resplandeciente imperio,
En un fluido de oro vuela con potencia ,
Y entre los rayos del sol se mece un momento,
Pero el hombre lo golpeó de un dolor muy fuerte
Siente el plomo cazador derretir en su herida,
Su ala se despoja, y su real abrigo,
Vuela como un colchón de plumas que arranca un cuchillo,
Desposeído de las alturas, su peso lo precipita,
En la nieve del monte, se hunde y palpita,
Y en el espejo de hielo con un sueño pesado,
Cierra este ojo, respetado del sol.
Homenaje a Asturias de Alfred de Vigny,
Poeta francés, amigo de Victor Hugo .