Siempre me gusto escribir, cuando era niña escribía en mi diario \"Esta mañana salí y el sol me sonrío\", cuando era una muchachilla escribía de mi primer amor, alguna vez tuve el sueño de escribir un libro o una canción de lo que todo mundo hablara, luego me conforme con simples escritos, luego se me hacía tan estúpido que deje de escribir pero entonces mi alma se revelo y me obligo, sin embargo nada de lo que escribía me parecía suficiente, no era tan bueno, o tan desgarrador, no expresaba mi inmenso dolor, ni la felicidad que me embargaba, no saciaba la sed que me provocaba la soledad y me sentí insuficiente para mí, pensaba, si mi mejor terapia había mermado ¿Ahora que me podía salvar? Lo único que me salvo fue cuando comprendí que mi mejor escrito lo hice cuando tenía 6 años y puse en la orilla de mi diario \"Esta mañana salí y el sol me sonrió\".
Flor Hdez. México.