¿Te acordas cuándo entre risas me contabas que te gustaba aquel muchacho de ojos saltones con mirada oscura?
¿Te acordas cuándo te contaba lo mucho que me habían lastimado y que no tendría esperanzas de volver a confiar?
¿Te acordas de algunas cosas? Porque yo me acuerdo de todas, me acuerdo de las mil palabras que soltamos sin sentido, de las mil veces que dijimos que está sería una amistad eterna. Pero hoy no estás. No estás porque decidiste borrarme de tú presente, de tú pasado y te liberaste de todos aquellos recuerdos que unían a nuestra amistad, te liberaste de mi presencia y de todo lo que te ataba a este lugar.
Pero yo no lo hice de la misma manera, tome tus mismas herramientas para el olvido, eso te lo aseguro. Pero algunas veces, digamos que cada vez que puedo, visito mi almacén de recuerdos, de recuerdos que no tienen olvido. Y de recuerdos que llenan mi mente de ti.