EL MISMO EROS QUEDÓ EXHAUSTO...
¡COMPLETA CUBRIÓ NUESTRA PASIÓN!
Llevar la cuenta quise de todo cuanto hicimos,
adicto fui a tu cuerpo, declaro sin recelo
la vida tú me diste, sentí tenía el cielo
en cada encuentro a diario, feliz el rol cumplimos.
Gozando pleno el clímax, delicia mutua dimos
total a nuestras formas, me urgía fiel consuelo
si acaso triste andaba, constante fue el desvelo
con creces bien cobrabas, en fuego nos cubrimos.
Sorbías rica savia, te daba sin medida
aquellos jugos prestos, serena y muy cadente
ponías rienda al potro, que nadie más montaba.
Seguro estoy quedaste, dichosa y bien servida
la piel constante aclara, pues supe ser torrente
que en ti fluyó con fuerza, del norte al sur te amaba.
JAIME IGNACIO JARAMILLO CORRALES
Condorandino.