La tarde era gris y melancólica
Hundía mi alma en profunda tristeza
O quizás era mi gris melancolía
La que hizo de la tarde se llenara de tristeza
Con pasos cansinos arrastraba mi alma compungida
Los árboles me parecían brazos de troncos secos
O tal vez los árboles estaban compungidos
Al ver mis brazos semejantes a troncos secos.
En el alfeízar de tu ventana
Tu hermosura desnudaba el atardecer
O quizás era el atardecer
Que desnudaba tu hermosura.
Tus juguetones ojos de color azabache
Parecían desmenuzar mi alma
O quien sabe era mi alma
Quien desmenuzaba tus ojos de color azabache
Las flores me llenaron de sensual hermosura
Cuando con disimulo te vieron sonreír
O quizás que al ver tu sensual hermosura
Hasta las flores parecían sonreír
Desde entonces mi alma está extraviada
Dejándome en cruel abandono
O quizás a notar mi alma extraviada
Eres tú quien me ha dejado en abandono.
Eres tú quien me ha llevado a tal confusión
Haciendo que pierda toda mi ilusión
O tal vez es la pérdida de mi ilusión
Que me ha hundido en tal confusión.
¿Qué crees tú?
Lima 29 de abril del 2018