Cual estrella abrillantada
espero tu llegada
titilando en la distancia
veo tu cuerpo como avanza
Y en el primer abrazo
en el ocaso del ayer
caen hojas del pasado
dando paso al renacer
Y estoy atiborrado
al poder sentir tu piel
por su indeleble fragancia
y su tonalidad miel
Luego en húmedas caricias
me despido de la sed
que un día de arte y de café
dejaste dentro de mí ser.