¡ÁUREOS RAYOS!
Soneto Heroico, Hexadecasílabo Pleno.
Regresivo.
Aquí quedaron constancias, de aquella fiesta encendida,
afán llevaban los cuerpos, fluidos nos envolvían,
y todos nuestros tejidos, inquietos lumbre pedían:
¡Sedientos poros se abrían, chupar queriendo la vida!
Llegó el momento solemne, y allí en el lecho tendida,
en un orgasmo asombroso, los dioses nos consentían,
palpar las pieles tan húmedas, sentí que fuentes corrían:
¡Después del éxtasis pleno, te vi en mi pecho dormida!
Salieron áureos rayos, y un trino nos anunciaba,
que aquella hermosa faena, le puso sello a la noche:
¡Así, volando los pájaros, lección de amor me quedaba!
Testigo fuiste tú tálamo, de aquel sobrado derroche,
allí en la sábana blanca, también el clímax dejaba:
¡De nuestras zonas erógenas, divino y feraz el broche!
JAIME IGNACIO JARAMILLO CORRALES
Condorandino.