Madre eres un mes,
eres Mayo,
eres un año.
Eres toda la vida,
cuando me dejan sola y sin esperanza
A veces te siento tan grande,
que debo soñarte en partes,
en varias noches,
todas las estaciones,
infinitos atardeceres.
Madre,
no has dejado de ser actual,
siento que eres mi ángel.
En las tinieblas me ofreces luz,
en el frío abrazo y abrigo,
en la tristeza esperanza;
en los momentos difíciles,
eres la llave de nuevos sueños.
Madre vives en las estrellas,
detrás de la Luna.
Eres nube,
río correntoso,
la hermana del mar.
Te formo, te pienso,
desvaneces y
nuevamente te recuerdo.
Te soy fiel en el pensamiento
vives más allá de la distancia.
Siempre retornas a mí.
Madre más que una palabra,
más que un significado,
por encima de todo,
un recuerdo lleno de colores,
una sensación de dulce y fresco.
Por Walter Trujillo Moreno, Mayo 2018, poema dedicado a mi Madre,
a la Madre de mi amiga, a la madre del hombre, a la madre del Universo.