A ti,
que te conozco a través de historias de terceros.
A ti,
que te conozco a través del espíritu de mi madre.
A través de la risa contagiosa de mi tía,
A través de los chistes de mi abuelo,
A través de los sermones de mi tío,
de los abrazos de mis primos
de las mañas que traigo en mi sangre
del cantar a todo pulmón en una sola voz
canciones que conocemos por ti.
Y es a ti que te cantamos.
Te cantamos a ti.
Abuela,
Te conozco,
A través del cariño que supera
todas las típicas riñas de familia.
A través del amor que nos desborda,
Un amor que sobrepasa espacios ínter-temporales,
Ese amor que tú nos diste
Ese amor que,
desde donde sea que estés,
tú nos das.
Y me hace tan feliz saber que eres mi abuela.
Tú,
Que orgullosamente mostrabas
quien realmente eras
Sin importar lo que dijeran.
Tú,
Que teniendo tan poco,
entregabas todo
y un chin más.
Tú,
Que criaste una familia entera
¡Una familia grande y hermosa!
Tú,
Que cuidaste tu comunidad
como a tu propia casa,
Que criaste muchachitas de campo
como a tus propias hijas,
Tú,
Que encontrabas a tu Dios en todas partes,
Tú,
Que te gozabas todo,
Que cantabas sin importar quien escuchara,
Que ayudabas a todo el que por tu frente caminara.
Tú,
abuela,
eres una estrella.
Y aunque sólo te tuve por casi dos años, abuela.
¡Qué alegría tenerte esos casi dos años!
¡Setecientos treinta días!
Y aunque quisiera haberte tenido físicamente
hasta el infinito,
Te tengo espiritualmente,
Te siento
En mí
Conmigo
Siempre.
(Hasta más allá del infinito)