CAMINAS
Tan lejos de mí, ella camina
otros senderos sus pies hollando
ella sonriendo, yo suspirando
por amar la rosa y a la espina;
acarician sus negros cabellos
céfiros vientos, mira otros cielos
florecen en su pecho mis anhelos
una nueva luz, sus ojos bellos;
la quise pero nunca fue mía
volé su cielo, lo permitía
dije: ¡Te quiero! – ella sonreía-
ella tendría que marchar un día;
la vi alejarse hacia el horizonte
se perdió mi musa al atardecer,
el canto del jilguero en el monte
se alejó entre sus besos de mujer;
callarán mis labios sus tormentos
te vas de mí, sin haber llegado
hoy, te olvido sin haberte amado
jamás escucharás mis lamentos;
tan lejos de mí, ella camina
el poeta llora su despedida,
inunda la tristeza mi vida
por amar la rosa y a la espina.