Eva

El paseo

Que te parece si me dejas pasear mis labios por tu piel.

Pasear por el perfil de tu nariz, por el surco de tu trémulo párpado, por la onda de tu ceja. 


Llegaré a la playa de tu mejilla y acamparé en lo alto de tu viril mentón, para ir siguiendo el sendero hasta el hueco de tu suave y cálido cuello.

Descansaré con un profundo suspiro en tu oreja, y de ahí saldrá en forma de gemido tu queja.

Para calmarla llevarás mis labios hasta tu húmeda boca y así terminaré mi paseo, en tu ansiada y húmeda boca.


Eva