Cada mañana que te veo, entiendo por qué estoy a tu lado,
comprendo, por qué de ti me he enamorado,
te confieso que aun ahora me siento asustado,
pues no dejo de pensar en cómo te podría afectar mi pasado.
Y te confieso que el amor que siento por ti va creciendo,
lo percibo cada día que te voy viendo,
pues mi corazón, si no te vé, termina sufriendo,
y solo desea ir a tu lado y me lleva corriendo.
Espero siempre tenerte a mi lado y no perderte,
cada mañana tener la dicha, al abrir mis ojos de poder verte,
es para mi una bendición que la vida me dé la oportunidad de quererte,
te amo mucho y me encargaré de protegerte.
Dejando atrás todo aquello que he vivido,
cuando caminaba por la vida y estaba perdido,
era un hombre que vivía sin sentido,
pues de todo lo bueno, yo me había caído.
Gracias por aparecer en mi historia,
por reescribir mi vida con una dulce dedicatoria,
porque a tu lado siento que me espera una gran victoria,
un final feliz que coronará nuestra trayectoria.