(I)
Divinizada gracia...
la señora
de mis sueños,
tenuemente
desplazada...
en la noche
sin consciencia,
lánguidamente
desbocada...
en el éter sin memoria,
del jardín...
impuramente
desamortizado,
por lo grácil de su sueño.
(II)
Gloria venturosa...
la amapola sin donaire,
tristemente renovada...
en la noche de los celos,
constreñida
impávidamente...
en el marco sin memoria,
del jardín...
homéricamente
desaconsejado,
por lo estéril de su vuelo.
(III)
EL FUTURO ES DE TODOS...
Nada...
hay maldito
en el hombre,
ni en nación alguna,
ni en pueblo
alguno...
la caridad
es el único alimento...
del alma humana,
y la dicha...
morará
por siempre,
en el corazón
generoso
que la acoge.
P.D:
Un día nuestros hijos,
herederán...
con generosa prodigalidad,
la tierra que se les niega.