Caminando calle arriba, y así empieza mi cuento
en el alero, en una esquina, hay un nido
donde todos los años viene una golondrina
y allí la espera, porque vive todo el año
un gorrión enamorado, que lo cuida
con ansias espera la primavera
para que venga su amada viajera
entra y sale cada día, llenando la nevera
ya salen las flores, ríen las higueras
y el pobre gorrión, asomado a su nido la espera
con cuanto amor la recibe, con su pico
se dan besos y mas besos y aletean
y jugando corren al nido, su hogar los espera
dulce verano, hermosa primavera
que bonito es ver a los dos enamorados
haciendo sus tareas, a la sombra de las tejas
sueña y ríe la mañana ,el sol coquetea
al ritmo de una campana, su vuelo planean
que hermoso rincón, hogar de amor
la golondrina y el gorrión hacen buena pareja
dos insignificantes avecillas, que lección
no hay prejuicios, no hay color
las plumas son iguales para Dios
y en el aire el amor se recrea
yo me paso cada día, y miro el nido
y como hace viento en primavera
me lloran un poco los ojos, polvo de las tejas
con cuanto cariño, es hermoso ser niña
calle empedrada, cuesta arriba , en la esquina
en el alero viven, no tiene numero , la vecina
pero siento que al final, concluye un poco mal mi cuento
porque la primavera termina y ha de irse
de viaje otra vez la golondrina, que dolor
como sufre el corazón del gorrión
desde la teja con su alíta le dice adíos
y un suspiro y una lágrima al suelo cayó
y visita en nido cada día, y lo cuida con amor
y sueña que ya es primavera, dentro de su corazón...