¡HUELLAS I!
Cuartetos Hexadecasílabos
Preguntan qué es la excelencia, no está en ser hombre erudito,
a quien de ti necesite mejor tenedle clemencia,
porque quien al pueblo quiere, es dueño de inteligencia:
¡En estas lídes quisiera tornarme presto y perito!
Jamás resolveré nada, con estos versos, yo creo,
sacarme quiero de adentro, la tan molesta impotencia,
y hacer que brillen muy plenas, razón, cordura y sapiencia:
¡Doquier que miran mis ojos, sufrir al pueblo es que veo!
Que nazcan versos yo quiero, formando inmenso un abrazo,
de las antípodas vengo, luego de hacer un crucero,
montado sobre Pegaso, recorriendo el mundo entero:
¡Y allí pude darme cuenta, tienes sin razón, rechazo!
De todas formas me opongo, a ver un niño famélico,
mirando aquí el mapamundi, por miles mueren a diario,
reclaman justo alimento, reciben un poemario:
¡De su sustento el dinero, se invierte en material bélico!
De mil pasiones hablando, están las sílabas prestas,
al bardo acatan sin duda, acuden siempre puntuales,
profunda siento la pena, llegaron ya las señales:
¡Final las sumas tendrán, ahora llegan las restas!
Uniendo vengo las sílabas, podrán darse buena cuenta,
llamadme como queráis, desde rapsoda a poeta,
deseo aquí detenerme, pues bardo soy y no atleta:
¡Versar así tan sencillo, mi alma deja sedienta!
Dejarle al mundo yo quiero, mis huellas hechas ternura,
confieso no me interesa, aspirar a galardones,
denuncio a quienes al pueblo, rapaces lobos ladrones:
¡Quitaron toda esperanza, cobrando impuestos de usura!
Así tal cual empecé, de nuevo anuncio y repito,
jamás, prometo, perder, el buen obrar con decencia,
razón ninguna me importa, que me haga dejar mi esencia:
¡Con tantos hombres rufianes, mi juicio nunca ejercito!
JAIME IGNACIO JARAMILLO CORRALES
Condorandino.