Cuando te pienso me siento
Sutilmente acompañado,
Casi es místico mi estado
Porque con fe lo consiento;
Y, en verdad, que no te miento,
Ese aliento tan sagrado
Lo percibo yo a mi lado
Confundido con el viento;
Y se me escapa un suspiro
Con anhelante alegría
Al salir de mi retiro
Y disfrutar la armonía,
Pues te pienso y te respiro
Y te siento toda mía…