Si fueras retiro, serias gris o marrón o tal vez un amarillo amplio, horizontal y silencioso.
Si fueras abstracción, serias un suspiro afín al miedo.
Si fueras un paisaje, serias una isla o un desierto árido, o una cabaña de habitación vacia.
Si fueras sentimiento, serias plenitud, serias paz, tristeza, angustia o congoja en la montaña.
Lo cierto es que eres algo vivido, algo con mucha intensidad que no tiene medida.
Oscilas entre los colores frios y los colores calidos, entre los paisajes hermosos y los paisajes desolados.
Entre los sentimientos deseados y los abandonados.
Clara ambivalencia, péndulo inmortal.
De estadio desolador a medio plenificante de vida.