Esteban Mario Couceyro

La interminable vigilia

Todos los pájaros

levantaron vuelo

en ese amanecer

de extraña claridad

……..

el viento quieto

en cada orilla del vasto mar.

 

Mis pasos

se multiplican

alineados

mientras

dejan esa inútil acción

de traslado.

 

Y los pájaros

.

me pregunto

…….

para qué vuelan

en un cielo sin nubes

reflejándose

en las aguas quietas del mar.

 

Me detengo

llevando mis manos a la cabeza

cierro los ojos

y busco dentro mío

tus recuerdos

..

el aroma

de los cabellos

amaneciendo en mi almohada

mientras mis manos

abrazando el cuerpo amado

……….

tu respiración acompasada

y yo acompañando ese ritmo

al punto de fundirme

en tu vida

………..

y cuando despiertas

con ese beso robado

en el

que se rinden tus labios

entregados

en inevitable sonrisa

………..

y yo que te digo

de mi amor

arrojándome

en la infinita profundidad

de tu mirar.

 

 

Suelto mis brazos en la nada

mirando el horizonte

esa fina línea

que separa al cielo

de mi pena

……..

Cierro los ojos

y lloro

los más absolutos mares

en brutales olas

que revuelven los fondos

dejando

todas las resacas

ocultas tras los recuerdos.

 

Mientras el viento furibundo

golpea las naves

y mi cuerpo

como si yo fuese el enemigo

autor

de todo lo pasado

como si mis ropas

fuesen la culpa

de mis pensamientos

semejantes a los árboles

adueñándose del cielo

con sus infinitas hojas

robando pájaros

en las oscuras noches.

 

Una vez más abro los ojos

el mar quieto

los pájaros en lento vuelo

se duplican reflejados

en esas aguas

que llegan al infinito.

 

Mis pasos

van quedando

en prolija hilera

por detrás de mi

es eso solo

lo que voy dejando

en esta interminable vigilia

donde no debo

cerrar los ojos.