Quiero ser eso que quieres y no dices.
Atracar mi barca en la baia de tus contentos, y en las islas del viento que toca en tu atardecer.
Mujer de mi vida que atraviesa mis desiertos sin una gota de agua, y arrullas mi calma, mi desespero, mi paciencia mi sentir y el te quiero.
Ganas de vivir no me han faltado desde que te veo: ¿por qué no existir Para ti?
La soledad te teme caundo tú estas conmigo, la oscuridad se aleja al llegar tu luz. Ay mujer.... no existen ojos que soporten ver tanta belleza.
Infinita eres con todo tu enbeleso, en la natura de tu andar de terciopelo; que hasta el mismo cielo te besa acariciando tus cabellos de fuego.
Niña hermosa de aroma en rosa cuánto te quiero que amarte mas no puedo.
Marc Téllez González.