Mi vida amorosa
tiene dos partes
amores reales y
amores imaginarios
que un momento
parecieron posibles
pero luego se me escaparon
de las manos
promesas truncas
fantasías incumplidas
soy la suma de las personas que amé
y de las que quise amar y no pude
de los amores que pudieron ser
y no fueron
amores imaginarios
que el destino, vicioso, dispersó
amores del bien
y del mal
amores que se quedan apagados
amores que incendian mi memoria
dos espíritus flotando
en la galaxia de los afectos y rencores
las personas cambian
con los días
los amores van cambiando también
extinguiéndose y renaciendo
amor que pudo ser
amor que debió ocurrir y maldita sea!
no ocurrió
los amores inconclusos
son los que me persiguen
porque quizá
de haber florecido
habría sido infinitamente más feliz
que cualquier otro que me tocó vivir.