No he visto cosa más rara en el mundo que el amor, ese tiene sus cuantos complejos, y también sus grandes paradigmas, es un vengador a suelto, con sé de perdición, es un cúmulo de personas pidiendo revolución, es un himno nacional encarnado por anarquistas, es un salto desde la esperanza, hasta el vacío del rencor, es una bestia atrapada en el cuerpo de un animal, es una espina sintiendo flor, es un pedazo de mierda vagando en el olvido, como antes dije : no he visto cosa más rara en el mundo que el amor.
El suele convertirse en una utopía perfecta, en el edén de los malditos, se quiere disfrazar de alba, teniendo el sello de ocaso, se esconde tras la necesidad, y nos sacia de insatisfacciòn, intenta parecer una oveja perdida, cuando en realidad sea un maldito lobo al asecho, un monstruo de pesadillas, un creador de deseos, y un benefactor con caprichos, es una sombra, aunque intente sonar como reflejo, ya lo he dicho otras veces : no he visto cosa más rara en el mundo que el amor.
Me ha corrompido desde antes, es un verdugo perpetuo, una sinfonía neutral, un paisaje sin sonido, me escupe día y noche, con su sonrisa al desnudo, a fin de cuentas, es mi fiel amigo.