La primera vez que estuve al borde de tus labios.
Traté de vivir acorde al recuerdo de un amor furtivo.
La primera vez que sentí
tu mano deteniendo mi corazón vivo.
armándome de un beso irreverented de un recuerdo resisto al olvido.
Fue la gota que inundó mi espacio.
La noche que luego de haberte amado tanto,
al despertar ya te había perdido.
y mis ojos enjuagados de amarga impotencia de silencio crespo
Ordeñados de desatino.
La primera que caminé al contén de las aceras
me senté en las paradas de ómnibus sin destinos.
Procesión inerte de besos
tatuados en mi alma.
Sombras que me consolaban
al buscarte a ti con todos mis sentidos.
La primera vez que apareciste.
Desde mi naufragio en mi isla del olvido.
Trajiste los bolsillos cargados de fuegos que encendieron mi pecho.
Como noche estrellada con auroras y luces de luciérnagas en torbellino.
Fue la primera vez que volví a la vida en tantos años. Cuando al despertarme te descubrí que no era un sueño, que estabas desnuda, esperando al sol conmigo.