Esa nuestra primera vez de aquel beso desenfrenado, tan delicado y bajo una Luna llena; apasionados cuan dos jóvenes Éramos y como un par de tortolos en nuestro primer beso, recordando aquel nuestro gran tiempo, cuando el encuentro fue duradero y hoy el momento solo en recuerdos de aquellos nuestros días tan bellos.
Grandes tiempos eran aquellos cuando por tu casa pasaba y miraba a cada instante buscando excusas solo para verte y sentir en mi pecho la maravilla de un susto tremendo, no se si por miedo o por el simple hecho de verte a los ojos, esos tan bellos y pensar en nuestro primer beso.
Que juventud la que de niños vivimos, cuando el abuso no pasaba de un rose; cuando el pecado más grande solo era pico de esos tan tontos y la vez tan bonito, y ahora en pasado se han convertido; ¡vaya que tiempos! aquellos cuando chicos.
Aunque el pasado es pasado, pero esos tiempos no hay que desecharlos y de ello no nos queda nada; solo recuerdos que no hay que olvidarlos; son juventudes perfectas que no volverán, así nosotros queramos, y no omitiremos así queden en el pasado.
HENRY RUIZ
28 DE MAYO 2018