Existe algo de barniz coqueto
Y extraño,
Que envuelve sutil
La extrema levedad
De tu sombra.
Despejas tinieblas
En este Otoño, en el que
Hoy alumbra la estrella
Más amada del Planeta.
Brilla mí horizonte sin males
Mí horizonte del Sur,
Hoy tuve dulces sueños.
No me acecho el peligro
De No Ser...
Acepto los designios
De mí Dios
Ya no tienen dueño
Las terribles consecuencias
Y posibles derrotas.