Formando vida.
Decidió huir, dejar su hogar y formar uno nuevo, cambiar su destino.
Grito a la vida, que era imposible rendirse, que no podría nunca nadie derrotarla.
Ella sola estaba bien, estaba tranquila y hacia de su vida un canto poético.
Fue dejando su adorable marca por todos los lugares en los que paraba.
Hasta que en un momento de su vida, se debutó... Observó y decidió.
Aquel era el lugar en el cual se quería realizar, allí quería formar su nueva vida.
Mientras pasaba el tiempo, ella iba creando un carácter duro, terso y frío.
Valiente y delicada, sencilla y con desplante, ella fue formando su esencia.
Conquistó algunos corazones, dejando de lado a los que estaban ocupados.
Con un hogar cálido y un lindo amor, ella comenzó a disfrutar la vida.
Trabajaba en lo que le gustaba, hacia lo que quería y disfrutaba el tiempo.
Solía jugar con los niños en la plaza principal, corría por todos lados con su sonrisa.
Ella formó su destino, con buenas acciones y bondadosos pensamientos.