Deja el pensamiento libre
que fluya al viento sin ataduras,
esas que causan podredumbre
tristezas y amarguras.
Que remonte a las alturas
en busca de lo espiritual
del Dios que a sus criaturas
las acompaña puntual..
Deja los ojos de luz llenar
del sol nacido en la mañana,
y la lluvia el rostro refrescar
purificadora del alma.
Contemplar un bello atardecer
sin sufrimiento ni mordazas,
esperando llegar el amanecer
y recobrar las esperanzas.
Deja el pecho expandirse
en el más hondo de los suspiro,
para dulcemente inspirarse
en el versar más sentido.
Caminar paso a paso
y de naturaleza henchido,
bajo un cielo vestido de raso
y de nubes negras barrido.
Deja el pensamiento en libertad
no te tortures, no mires atrás,
aprende de la adversidad
y se feliz una vez más.
Fina