Hay veces en las que no te entiendo, pero no te preocupes; hay veces en las que ni yo me entiendo.
Y aunque hay veces en las que quiero estar sola y olvidarme de todos, regreso a la normalidad y la única persona a la que quiero a mi lado eres tú.
Somos una pareja imperfecta. No cubrimos el estándar de las novelas: un tipo con ojos azules, la chica con cuerpo de barbie y con buenas posiciones económicas.
Somos dos personas reales, que conocen cada cosa del pasado y se han aceptado así, porque lo que importa es el presente en el que vivimos y el futuro con el que hemos soñado.
Sé que hay veces que tendemos a discutir por cosas sin sentido y otras veces por errores y molestias.
Pero todas las parejas pasan por ese momento; y sin agredir, se habla y vuelven a la normalidad.
Lo curioso es que somos una pareja imperfecta en toda la extensión de la palabra, y es lo que nos hace ser más perfectos.
Nosotros nos enamoramos primero por lo que somos, nos vimos el alma y nos exploramos los sentidos. Dejamos de lado la banalidad de fijarnos en el exterior y nos amamos por lo que somos y por lo que damos.
La confianza se va construyendo poco a poco, en el mismo ritmo en que se construye una casa: cimientos, castillos, paredes y trabes; para tener un techo bien firme.
y sabes que...
Creo que juntos vamos a construir una vida muy hermosa y firme, lo importante es no dejar que cada error nos haga caer.