Haces que vuelva mi cielo
a tener su tono azul.
Pintas de colores bellos
mis mañanas solo tú.
Aunque nubes grises vengan
cuando cargo con mi cruz,
tú despejas las tinieblas
alumbrando con tu luz.
Con pinceles y acuarelas
extraídos de un baúl
me pintas una escalera
con peldaños de bambú
que me llevan a tu vera,
que me salvan de un alud
del color de mis problemas.
Tu regazo es mi quietud.
Tus ojos color café
provocan mi esclavitud
uno me dice \"Je t\'aime\"
y el otro es un déjà vu.