Tan empinada la pendiente
Tan alta la montaña…
La raya desde la pinza al tobillo del pantalón gris,
el gabán de lana beige,
zapatos lisos, negros.
Encorvado, los años acompañan su figura.
Al lado Ella,
Apoya calma su brazo
para sostener,
para sostenerse,
con otros pasos,
con otros tiempos.
Agotan la calle que siempre recorrieron.
Ya no conocen a los que fáciles suben San Vicente,
y que no sienten la pendiente,
y que no miden la montaña…
Jóvenes.