LA ROSA Y LA MARIPOSA
De Gaviota Romero
Una mañana de abril, una linda mariposa
descubrió una hermosa rosa roja.
La tímida mariposa a la rosa se acercó,
y moviendo sus alas, en voz baja preguntó:
-¿Me dejas probar tu néctar? Tu amiga quiero ser yo.
La rosa complacida sus pétalos más abrió.
La bonita mariposa, agradecida y feliz en la rosa se posó.
Desde aquel día, una bonita amistad floreció.
Pasaban felices los días, compartiendo su aroma
y color, hasta que se iba el sol.
Una mañana en que la mariposa al lugar de la
rosa llegó, su pequeño corazón de dolor se estremeció.
En el suelo, su mejor amiga estaba rota, mustia, sin olor.
¿Qué manos asesinas, de su rosal la arrancó?
Llorando la mariposa sus pétalos acarició.
A la mañana siguiente, alguien en el suelo se encontró
una flor ya marchitada, y a su lado una mariposa, que
por amistad y amor, quedó muerta allí tirada...
al lado de aquella flor.
Por amor ágape, a una amistad, se puede dar la vida por ella