Cuando de repente cayó el día
ni siquiera sabía si sobrevivía,
Todo fue tan inesperado
ya no se donde ando parado.
Saber que no te voy a tener a diario,
es entender el comienzo de mi calvario.
El tiempo es algo que nunca pude entender,
Y hoy ya no puedo ser tuyo, ni pretender.
Esa oscura sinceridad acabo con el amor,
La fría distancia atosiga el corazón
Lo que quedo nítido es el dolor,
Y un alma apenada por la dolorosa razón.
Fue la procrastinación quien puso fin a la pasión,
mañana no puedo dedicarte ninguna canción.
Ya no te tengo, es cierto.
Ya no te encuentro como antes lo hacía,
Pero me conformo con esto
Porque hoy y siempre estas en la poesía.