Alondra aturdida
por los hielos...
en la fuente desnutrida
del olvido,
desnudada...
en la alberca sin memoria,
deshojada en la fuente
del espino...
eres rosa primorosa
en la esencia descuidada
de su labio...
clavo herido,
huido trazo...
en la noche
compungida
de su abrazo.