somosnada

el viento se los llevó bailando. pájaros rojos buscando cielos azules.

¿Dónde encontraremos todo aquello que éramos las tardes de domingo cuando el violento viento azotaba nuestra vida y revelaba nuestros secretos en una dulce campanada enamorada?
Rebusco entre mis bolsillos y no encuentro nada de lo que éramos; solo un desierto salado producido por nuestras lágrimas.
No hay ni una sola mirada nuestra, ni los minutos que pasábamos ante el espejo que diga quiénes somos, nuestras huellas han desaparecido en el largo camino dejándonos con el deseo de querer escuchar el amargo canto de los dulces pájaros, rozar nuestros alientos y cubrir el brillante sol con la sombra de tu cuerpo.
No digas nada, por favor, permítete soñar…
Quiero que me bañes con tu sonrisa como lo has hecho hasta este momento, acariciarte con palabras, pero también con besos
rodeadas de fuego, buscando la esperanza de ser recordadas entre colores cálidos mientras que lejos, bien lejos nuestro, se pintan pájaros rojos que parten el cielo y se parten entre ellos buscando la libertad.