1: Esa mierda que llamamos amor
no es más que una vaga ilusión
de un triste corazón
buscando comprensión.
2: ¿O será, tal vez,
un sentimiento puro y fiel,
que entra sin permiso en aquel
que abre su corazón ante él?
1: Es un perverso traidor
que, al principio, te hace sentir de lo mejor
y, luego, deriva en antónimo:
aquel que llamamos dolor.
2: ¿No le parece mejor
que es algo inexplicable
que le provoca al corazón
experiencias inefables?
1: Insisto, mi señor,
le digo que no hay veneno peor
que eso que llamamos amor,
pues, lentamente, te daña el corazón.
2: Yo opino diferente,
no hay esencia más dulce que éste,
a tu vida el color devuelve,
a tu alma mantiene alegre.